El equipo burgalés puso el corazón en el partido, que fue intenso, pero la calidad del conjunto palentino se impuso para lograr un merecido ascenso a la liga ACB.
Zunder Palencia se impone en la Final Four de Burgos y logra el ascenso a ACB.- FOTOS: Jarcha/Burgosdeporte
Adiós regreso a ACB. Se rompió el sueño surgido en el último tramo de la temporada cuando el Hereda San Pablo Burgos mejoró su juego y se metió con justicia en la Final Four de ascenso, tras eliminar al Estudiantes. El gran esfuerzo de la plantilla y el cuerpo técnico, con Curro Segura a la cabeza no ha sido suficiente para lograr un objetivo por el que equipos como Palencia llevaban luchando desde el comienzo de temporada.
El Hereda San Pablo puso todo el corazón en la final ante Zunder Palencia, pero tuvo que rendirse ante la evidencia de un rival que le superó de forma merecida, con claridad y con calidad de juego. Los palentinos siempre llevaron la iniciativa en el marcador y se impusieron con autoridad para lograr un premio merecido. El Hereda san Pablo tendrá que esperar y afrontar ahora una etapa nueva pero, suponemos, que con idéntico objetivo de volver a estar entre los grandes del baloncesto español. Esta vez no ha podido ser.
Partido intenso desde el principio, en el que Palencia demostró desde el primer momento sus galones para llegar a esta final. Ya se presagiaba un partido muy complicado para el Hereda San Pablo y pudo comprobarse desde los primeros minutos, con un Palencia muy centrado en sus acciones defensivas y además con buen acierto en ataque.
El Hereda San Pablo no estuvo todo lo intenso que se esperaba en el inicio de partido, con un 12- 6 de parcial en los primeros minutos. Alex López acercaba a los burgaleses a tres puntos con un 15-12 pero la reacción de Palencia con gran acierto en los lanzamientos exteriores ponían de nuevo el partido en clara ventaja palentina, 28-22 en el final del primer cuarto.
Palencia era superior a Burgos en este inicio de partido y en el segundo cuarto el guión no cambió apenas. Un triple de San Miguel acercaba a los burgaleses a 5 puntos, 38-33, y la reacción burgalesa llegó a poner al Hereda San Pablo a un solo punto de diferencia, 41-40, pero otra vez Palencia no se dejó sorprender, y volvió a marcar diferencias antes del partido con buen juego de conjunto y sobre todo acierto en el tiro a canasta, para llegar al descanso con una diferencia de 8 puntos, 50-42 que dejaba a Palencia como favorito de cara a la segunda parte.
Y el tercer cuarto supuso la confirmación de un gran Palencia que buscaba claramente irse en el partido y lograr un ascenso para el que ha estado trabajando durante toda la temporada.
El equipo morado siempre llevó la iniciativa ante un San Pablo que apenas podía frenar a su rival y que no tenía acierto tampoco en sus acciones de ataque. Así las cosas, la voluntad de Hereda San Pablo chocaba ante la calidad de lo jugadores del Palencia, con las ideas muy claras, haciendo el partido que les interesaba para ir sumando poco a poco diferencias en el marcador.
El conjunto palentino jugaba sus mejores minutos del partido y además lo plasmaba en el marcador, se marcaba Palencia con 69-55. Estaba claro que el partido entraba en una fase muy decisiva. El Hereda San Pablo puso alma y corazón para no irse del partido. Con diferencias de 12 y 13 puntos, transcurrían los minutos sin que el equipo de Curro Segura lograra acercarse y poner en apuros al equipo morado. Con 73-61 y 12 puntos de diferencia que parecían ya una losa para los burgaleses.
El último cuarto era la también la última oportunidad para el San Pablo Burgos que había ido a remolque a lo largo de todo el partido del equipo palentino. Pero mucho tenían que cambiar las cosas para lograr como en la jornada del sábado una remontaba que se antojaba casi un sueño para Burgos.
Jugó a la desesperada el Hereda San Pablo, con corazón pero ya con poca claridad de ideas, ante un rival que no quería dejarse sorprender y que no bajaba la intensidad de su ataque en ningún momento. Curro Segura solicitaba un tiempo muerto para poner orden en su equipo y pedía tranquilidad a sus jugadores para afrontar una recta final decisiva en el partido.
Pero la reacción esperada no llegó y el Palencia se creció en la recta final del partido, arropado por los numerosos aficionados palentinos desplazados a Burgos, que ya comenzaron en los últimos 4 minutos a celebrar el ascenso a ACB.
Un equipo palentino que demostró que su segundo puesto en la liga regular de la temporada no fue casualidad y el gran equipo que tiene y que ha merecido el ascenso. Palencia hizo bie su trabajo hasta el final del partido y Hereda San Pablo fue poco a poco asumiendo que su remontada era imposible pese a contar con el Coliseum a su favor. Un golpe de realidad, oara poner punto final a una temporada convulsa e irregular, que mejoró mucho en la recta final, pero que no ha sido suficiente para recuperar la categoría perdida la temporada pasada. El buen trabajo del técnico Curro Segura no debe quedar en el olvido, ha sido arduo y valioso, volviendo a ilusionar a la ciudad con la ACB, pero finalmente el sueño no se ha podido cumplir.
El baloncesto burgalés sigue en LEB oro y además, ahora por primera vez, con dos equipos de la ciudad en la misma categoría. Nuevos tiempos que deberán afrontarse con altura de miras por todas las partes.
Ficha técnica
95 – Zunder Palencia: Alec Wintering (15), Devin Schmidt (7), Chumi Ortega (32), Konstantin Kostadinov (4) y Jonathan Kasibabu (4) –cinco inicial– Silvano Merlo (-), Davis Rozitis (-), Germán Martínez (-), Manuel Rodríguez (10), Mathieu Kamba (6), Chema González (-), Tanner McGrew (17).
83 – Hereda San Pablo Burgos: Luka Rupnik (5), Khyri Thomas (14), Ale López (13), Carlos Suárez (-) y Joey van Zegeren (-) –cinco inicial– Rodrigo San Miguel (3), Gonzalo Corbalán (6), Álex Barrera (15), Mindaugas Kačinas (2), Marc-Eddy Norelia (11), Rašid Mahalbašić (14), Obi Enechionyia (-). Terminó eliminado por cinco faltas personales Ale López.
Cuartos: 28-22; 22-20; 23-19; 22-22.
Árbitros: Ángel de Lucas, Guillermo Ríos e Igor Esteve.
Incidencias: Partido correspondiente a la final de la Final Four de LEB Oro disputado en el Coliseum ante 8551 espectadores.