No supo aprovechar sus numerosas oportunidades frente al O Parrulo B y encaja una nueva derrota.
FOTOS: Javier Renuncio “Jenga”
El Círculo BigMat mantiene su mala racha. La falta de pegada ante O Parrulo B le supuso la pasada jornada una derrota dolorosa en casa en un partido en el que disfrutó de numerosas oportunidades, pero careció de definición para transformarlas en goles. Y así resulta muy difícil ganar los partidos, sobre todo si el rival tiene más pegada de cara a puerta y sabe transformar las suyas.
La primera parte estuvo muy igualada, aunque a medida que avanzaban los minutos era los burgaleses quienes llegaban con más peligro a la portería rival. Ismael dispuso de la mejor oportunidad de los burgaleses, pero el guardameta visitante supo conjurar el peligro.
Antes del descanso llegaba la primera contrariedad para el Círculo BigMat, con la expulsión de Oliver tras dos reclamaciones a los árbitros. La tarjeta roja dejaba con un jugador menos a los burgaleses durante dos minutos, pero la buena defensa en este caso pudo evitar que el equipo gallego aprovechara su superioridad.
Con empate sin goles se llegó al descanso y en la reanudación ambos equipos buscaron la victoria, aunque con sistemas diferentes. El Círculo jugaba con más dominio y posesión de balón y acumuló numerosas oportunidades, mientras O Parrulo defendía atrás y presionaba en media cancha para robar balones y montar contragolpes. Y el sistema visitante funcionó mejor.
A los 25 minutos Alejandro adelantaba a los gallegos con un fuerte y colocado remate desde fuera del área tras un saque de esquina. Menos mal que la reacción burgalesa no se hizo esperar y dos minutos después Isma resolvía una jugada de ataque local, con un remate cruzado y muy colocado para establecer la igualada.
El partido entró a partir de esos momentos en claro dominio del Círculo BigMat en busca del segundo gol. Los burgaleses tuvieron hasta tres claras ocasiones para adelantarse en el marcador pero perdonaron y lo que suele suceder, en una contra tras una pérdida de balón, permitía a Noel marcar el segundo para el equipo gallego. 1-2 en el minuto 31.
Quedaba tiempo pero los nervios afloraban en el equipo burgalés, que no tenían su tarde y les faltaba confianza para aprovechar las ocasiones. El guardameta Borja con sus intervenciones evitó el empate y los remates desviados con todo a favor de los burgaleses hicieron que a falta de cinco minutos, todo siguiera igual, con ventaja de O Parrulo por 1-2. El técnico burgalés, Raúl Zamora, apostó entonces por el sistema portero-jugador, lo normal en estos casos pero el equipo verdiblanco se estrellaba una y otra vez en la buena defensa visitante, y a los 40 minutos otra pérdida de balón dejaba a Cancio la opción de un remate lejano, que se coló en la portería burgalesa. Era el 1-3 definitivo.
Una pena, porque el marcador pudo ser muy distinto de haber aprovechado el equipo burgalés sus ocasiones de gol. Sin pegada no hay paraiso.
