Estambul acogió la segunda prueba de esgrima puntuable para los JJ.OO a nivel individual y la primera puntuable a nivel de equipos. El tirador burgalés Álvaro Ibáñez, que venía de lograr un gran resultado en la última competición individual en la ciudad de Cali (Colombia), afrontaba la prueba con determinación.
A nivel individual, no fue la mejor competición del esgrimista pues, tras realizar una poule casi perfecta con 4 victorias y 1 sola derrota, perdía por un tocado en el primer encuentro del tablón de directas. Esto le dejó sin opción de clasificarse para el segundo día de competición individual.
La historia cambiaría el domingo en la competición por equipos, donde el combinado español, compuesto por el propio Álvaro Ibáñez, Juan Pedro Romero, Gerard Gonell y Manuel Bargues, conseguiría alzarse con el 4º puesto, perdiendo el encuentro por el bronce por un solo tocado, en el tocado de prioridad contra Corea.
Los españoles partían con el número 12 de la competición y en su camino derrotaron a Suecia en dieciseisavos, a Suiza en octavos, a Hungría en cuartos y finalmente perderían en semifinales contra Kazajistán y la lucha por el bronce contra Corea.
Con este resultado, el equipo español consigue sumar muchos puntos de cara a la clasificación olímpica y subir en el ranking de cara a afrontar las dos últimas competiciones de la temporada: los Juegos Europeos y el Campeonato del Mundo.
Por su parte, el tirador burgalés Álvaro Ibáñez asegura con este resultado la participación en dichas competiciones y seguir soñando con la ansiada clasificación para París 2024.
