La alumna virtual del Esgrima Cid Campeador desde hace más de dos años, Marta Sánchez-Emden, se ha colgado la medalla de bronce en el Campeonato Panamericano. La cidiana ha decidido volver a competir por Puerto Rico, su país natal, aunque tiene la doble nacionalidad estadounidense.
Marta Sánchez-Emden hizo unas previas muy aceptables, ya que solo perdía un asalto y sería por la mínima, lo que la colocaba en el cuadro de eliminaciones con el número tres. En el cuadro de cuartos de final, dio la sorpresa al ganar a Rachel El-Saleh de Estados Unidos por un 10/6 y de esta forma cumplía su sueño de estar en el reparto de metales.
Para entrar en la final, se enfrentó a Vania Oliveira de Brasil con la que mantuvo un asalto increíble llegando al ajustado y siempre peligroso nueve iguales donde se juega uno el todo del asalto y no pudo ser. Un 9/10 la dejaba sin disputar la final.
Sin duda alguna un meritorio bronce que la encaminará hacia el mundial de master (veteranos) en Croacia donde se encontrará por fin con su maestro virtual, Roberto Codón, y podrá recibir su primera clase presencial.
Ucrania y Georgia suman veinticinco refugiados en la esgrima
La esgrima de los cidianos ha acogido hasta veinticinco refugiados. El trato que reciben las madres con sus hijos, sumado al atractivo de este deporte y su rápida asimilación con la metodología que utilizan han sido las claves de la gran aceptación. Además de la docencia, el club se encarga de distribuir sus currículos para que puedan encontrar trabajo y asentarse en la ciudad si así lo desean en un futuro.
Roberto Codón sabe que su estancia en Burgos depende de lo que dure la guerra, pero quiere aportar a hacer su estancia más agradable y que las madres con sus hijos tengan una “válvula de escape” a la tensión que están viviendo.
Empezarán a participar en las competiciones esta temporada que está a punto de comenzar, tanto en las categorías de base como en las superiores. La mayoría son féminas y sin duda han aportado al club un ambiente inusual durante los meses de verano, ya que han llenado las pistas de esgrima a diario.