(Fotografía: Tommaso Pelagalli / Sprint Cycling)
Cierre triunfal de temporada para el Burgos BH en el Tour de Turquía. El equipo morado sumó su séptima victoria del año gracias a un sensacional Victor Langellotti, que festejó con rabia al cruzar la meta en la llegada en alto en Selçuk.
El monegasco ha confirmado en este 2023 su crecimiento como ciclista, sumando en su última carrera del año su segunda victoria como profesional, tras la lograda en agosto de 2022 en la Volta a Portugal. Un triunfo de entidad ante grandes rivales y cimentado en el gran trabajo de su equipo durante toda la etapa.
La segunda etapa de montaña de la carrera, tras la vivida el martes con la subida al Babadag, contó con la presencia de Antonio Angulo en la escapada. El cántabro del Burgos BH entró en un grupo de hasta 12 ciclistas que hizo camino y llegó con ventaja al primero de los dos puertos del día.
El propio Angulo fue el encargado de acelerar el ritmo en cabeza de carrera en las rampas más exigentes de la subida, permitiendo al grupo coronar con más de un minuto de renta.
En el pelotón se había realizado una importante selección, pero aún resistían cinco ciclistas morados. Un incansable Mario Aparicio se lanzó al ataque desde lejos, al igual que había hecho en etapas previas, pero el grupo no le permitió irse. Tras el descenso, el pelotón dio caza al grupo de Angulo en las primeras rampas de la subida a la Casa de la Virgen María, situada junto a la localidad de Selçuk.
Aparicio lanzó un nuevo ataque en el ascenso y, tras ello, se formó un corte en el que pudo entrar Victor Langellotti. El monegasco sabía dónde debía comenzar su sprint y espero a los metros finales para superar a sus rivales y adelantar al corredor que quedaba por delante. Un fuerte estacazo que le permitió alzar los brazos en línea de meta y subir a lo más alto del podio. A pocos segundos de él entró Ander Okamika, que mantiene su séptima plaza en la clasificación general.
Victor Langellotti explicaba: “No esperaba ganar. Sabía que el final era muy bueno para mí y que podría tener una oportunidad. Estaba en buena forma, pero nunca sabes si podrás ganar. El equipo hizo un gran trabajo. Mario atacó en la subida y mantuvo un buen ritmo en la pelea con los rivales”.
El ciclista apuntaba: “Sabía que tenía que esperar hasta el final, porque había algo de viento en contra. Aguanté hasta los últimos 200 metros para lanzar mi ataque y fue la decisión correcta. Estoy súper feliz y agradecido por el trabajo de todos los compañeros y el staff. Esta victoria significa mucho para mí. La temporada empezó bastante bien, pero luego atravesé algunos momentos complicados. Siempre es bueno ganar y esto me aporta mucha confianza. Es muy especial ser el único ciclista profesional de Mónaco. Estoy muy orgulloso de representar a mi país en cada carrera”.
Tan solo dos jornadas restan para que finalice el Tour de Turquía. Este sábado los ciclistas saldrán desde Selçuk y se dirigirán hacia el norte, a la localidad costera de Esmirna. La séptima etapa contará con un recorrido de 160 kilómetros con dos puertos puntuables, siendo el segundo de ellos el más largo y decisivo, ya que se corona a solo 22 kilómetros de meta.